Una bicicleta lo cambia todo

Una bicicleta puede parecer algo sencillo o poco importante cuando no conoces su poder. Pero una bici puede cambiar una vida y los chicos de Bicicletas sin Fronteras lo saben muy bien. Por eso están llevando a cabo un proyecto solidario para hacerlas llegar a Senegal, donde permiten el acceso de niños y niñas a la escuela, a la educación y a una vida mejor.

En la pequeña comunidad de Palmarín, esta organización sin ánimo de lucro también ha construido un taller, ha contratado un mecánico y ha habilitado un aparcamiento de bicis en el instituto. Cambios pequeños en apariencia, pero muy grandes en la práctica.

Este 2017 se cumplen doscientos años desde que se inventó esta fabulosa máquina de dos ruedas que actúan como motor de cambio, como instrumento de liberación. Y no se me ocurre mejor forma de celebrarlo que hacerla llegar a los lugares donde más necesarias son. Donde marcan una diferencia casi imposible de imaginar para nosotros.

70 € es una cantidad imposible de reunir para demasiada gente.

Pero también es una cantidad que, entre mucha gente, se vuelve muy fácil de conseguir.

El objetivo de esta campaña es aportar 10 bicicletas que revolucionen 10 vidas.

Cada bicicleta que logremos sumar será un niño o niña que ya no tenga que caminar durante dos horas para llegar a la escuela. Que no se juegue la vida en los caminos siendo un blanco fácil. Que llegará a clase con energía, en lugar de agotado/a y estará en mejores condiciones para aprender.

Pero no sólo puedes colaborar económicamente; también puedes ayudar compartiendo esta información, haciendo que otras personas sepan de este proyecto increíble y participen de él. ¡Por el poder de las bicicletas!