Materiales adaptados para niños con discapacidad intelectual

En los niños y jóvenes con discapacidad intelectual, la manipulación y experimentación es un aspecto imprescindible y esencial para el aprendizaje. En ocasiones, ciertos aprendizajes pueden parecer abstractos a los niños, y el hecho de tocar y manipular los objetos les permite hacer el enlace con el hecho en concreto.

Manipular permite al niño adquirir experiencias e interactuar con el entorno. A través de la manipulación de objetos, juegos y materiales personalizados, el niño con discapacidad intelectual conseguirá hitos importantes para su desarrollo y para su aprendizaje. A través de ellos, experimenta, se relaciona y aprende cómo funciona el mundo.

El hecho de que los niños trabajen en el aula con materiales manipulativos, adaptados a sus necesidades físicas y cognitivas, propicia en ellos un mejor auto concepto de sí mismos, lo cual influye directamente en el desarrollo de sus capacidades.

Al mismo tiempo, el trabajo manipulativo les prepara para realizar aprendizajes de mayor eficacia, con lo que mejorarán su rendimiento laboral y su autonomía personal dentro de la sociedad.

Las estrategias metodológicas son el punto de unión entre los objetivos y los contenidos. Es necesario combinarlas en función de la naturaleza de los contenidos sobre los que se va a trabajar, y, en el caso que nos ocupa, teniendo en cuenta las características y capacidades de los alumnos con necesidades especiales.

La utilidad del método de trabajo con materiales manipulativos, está definida por su capacidad de hacer asequible un contenido determinado a un alumno en concreto.

Una estrategia metodológica es más adecuada cuanto más se ajusta a las necesidades y maneras de aprender del alumno. Por ello, nuestra filosofía es personalizar los aprendizajes y materiales necesarios, para lograr que los niños con discapacidad intelectual puedan adquirirlos.

Basándonos en el principio de actividad y participación el alumno debe ser parte activa en el desarrollo de su propio aprendizaje. El proceso de aprender no debe constituirse en una mera adquisición pasiva de conocimientos algo que, para estos alumnos, por su tendencia, sería especialmente nocivo.

Los alumnos con discapacidad intelectual tienen en la actividad y en la práctica su mejor recurso para asimilar los aprendizajes que queremos que persistan.

Trabajar con objetos de forma manipulativa, hace que nuestra práctica educativa sea lo más experimental posible. Ellos aprenden lo que hacen, lo que manipular, lo que ven….

En nuestros alumnos con discapacidad intelectual, el proceso de generalización está habitualmente afectado. Si limitamos su aprendizaje a memorizar, lo más probable es que cuando tengan que utilizar lo aprendido en un contexto diferente no sean capaces de realizar la conexión necesaria para usar lo aprendido, generalizarlo y resolver el problema al que se enfrentan.

El que experimenten en sus aprendizajes del día a día, favorece y facilita esta generalización.

Cada alumno con discapacidad intelectual, presenta una circunstancia personal y cognitiva muy distinta. Los recursos con los que cuentan para ajustarse a situaciones de aprendizaje colectivas dependen, en gran medida, del momento personal en el que se encuentran.

Por tanto, es necesaria una pedagogía que se adapte al proceso de trabajo y al ritmo de cada niño en particular. Es en este contexto en el que podemos afirmar que el uso de objetos, juegos y materiales manipulativos adaptados son imprescindibles en el contexto educativo.

Gracias a la variedad de materiales con los que podemos trabajar de forma manipulativa, conseguimos variar el tipo de actividades a realizar de modo que evitamos que nuestros alumnos caigan en la mera repetición, el aburrimiento y por lo tanto en el desinterés.

En el contexto de aprendizajes manipulativos: podemos crear entornos comunicativos que favorecen el desarrollo del lenguaje en las personas con discapacidad intelectual. A través de juegos con objetos y materiales podemos desarrollar las funciones comunicativas, provocando situaciones que les obliguen a comunicarse con sus iguales.

Del mismo modo, con aquellos alumnos con desventajas sensoriales asociadas a su discapacidad intelectual, podemos usar el trabajo y la interacción con objetos que permitan el uso de los sentidos no afectados, así como la estimulación de aquellos que sí lo están.

La metodología de trabajo, a través de acciones manipulativas y de la experimentación del entorno en personas con discapacidad, se sostiene sobre los pilares de la actividad, la participación del niño en sus aprendizajes y la experimentación y manipulación de su entorno y de los objetos que se encuentran en él.

Esta metodología posee un amplio reconocimiento y propicia el desarrollo de funciones psicológicas más complejas como el lenguaje, el pensamiento, el razonamiento o la memoria. Con ella, lograremos que los niños y jóvenes con discapacidad sean personas plenas.

El onjetivo general del proyecto es facilitar el aprendizaje experimental y la interacción con el entorno en alumnos con discapacidad intelectual a través del uso de materiales manipulativos adaptados. Consiguiendo de forma más efectiva la conexión de lo experimentado y aprendido con conceptos más genéricos, una relación clave y fundamental para lograr una vida autónoma e independiente que promueva su participación plena en la sociedad.

A continuación, relatamos los objetivos específicos

• Desde el ámbito de la comunicación y el Lenguaje:

Nuestros alumnos presentan Necesidades Educativas Especiales en el desarrollo de ciertas habilidades cognitivas básicas, como son la atención y la memoria, que facilitan el acceso a los aprendizajes, en el desarrollo de las habilidades cognitivas superiores, como la abstracción y la simbolización, implicadas en la comprensión y expresión oral del lenguaje, así como la necesidad de dominar los procesos perceptivos léxicos, sintácticos y semánticos....

En el Servicio de Comunicación y Lenguaje se trabajan con diferentes tipos de materiales, ya que nuestros alumnos acceden a los aprendizajes a través de diversas vías sensoriales (táctil, visual, motor, auditivo), por lo que se precisan variados materiales manipulativos, como recurso motivador en el aprendizaje y para mejorar todos los aspectos del lenguaje.

• Desde el servicio de orientación psicopedagógica:

La evaluación psicopedagógica tiene una gran relevancia para los alumnos que presentan discapacidad intelectual y por tanto necesidades educativas especiales, derivadas de dicha discapacidad. Estos alumnos son personas que no han logrado adquirir los niveles de desarrollo conductual, cognitivo, socioadaptativo y educativo, adecuados a su edad.

 La Evaluación Psicopedagógica se realiza con el fin de recabar información relevante para delimitar las necesidades educativas especiales del alumno/a y para fundamentar las decisiones que, con respecto a las ayudas y apoyos, sean necesarias para desarrollar, en el mayor grado posible sus capacidades y competencias. También nos permite conocer cuál es el grado de desarrollo de un alumno y qué cambios se producen en él durante el proceso educativo. 

 En definitiva la evaluación psicopedagógica nos permite recoger información. Después de analizar todos los datos recogidos, los profesionales elaboran informes con una serie de pautas que serán muy útiles a los profesores del colegio y a la familia para mejorar, en la medida de lo posible, la adaptación del alumno a los diferentes aprendizajes y contextos del entorno escolar y familiar. Se trata de personalizar al máximo su proceso de enseñanza-aprendizaje. El objetivo final es conseguir la mejor adaptación posible a sus necesidades como alumno y como persona.

• Desde el ámbito de la educación física y la hidrocinesiterapia:

El área de educación física se atiende a niños y jóvenes con discapacidad intelectual, con edades comprendidas edades entre los tres y los 20 años.

Al tratarse de personas con necesidades educativas especiales, muchos de ellos se encuentran en una fase de desarrollo psicomotriz en la que será muy interesante poder trabajar tanto el tono, como los patrones que les irán haciendo integrar su esquema corporal y que posteriormente les facilitarán que uno de los dos hemisferios cerebrales se haga dominante Y así podrán organizarse con las relaciones espaciales externas a su propio cuerpo.

Los materiales adaptados que son necesarios  para esté área, tanto en la piscina (hidrocinesiterapia) como en educación física nos ayudarán a adaptar el entorno, generando espacios específicos y adecuados para trabajar y estimular a cada niños según la etapa del desarrollo en la que se encuentre, sacando así el máximo partido al desarrollo de sus funciones motoras.