Apoyo victimas saharauis por minas

El muro de la vergüenza que separa los territorios ocupados de los campamentos saharauis, está completamente minado, con más de  8 millones de minas antipersonas  a lo largo de dicho muro, construido por Marruecos y consentido por la ONU.

En los campamentos saharauis, hay una asociación y un centro que da cobertura sanitaria y asistencial a las víctimas de estas minas. El centro Martir Charif, está alejado de los campamentos, en las zonas liberadas. Hombres y mujeres conviven allí, atendidos por un grupo de voluntarios que hacen las labores médicas y alimentarias. A pesar de los trabajos de desminado que existen en la zona, no es suficiente, y hace unos meses, una niña se cobró la vida, debido a una de estas minas. Las consecuencias son nefastas. Los que sobreviven a una explosión de mina, quedan postrados en el centro de por vida, con amputación de miembros superiores y/o inferiores.

La vida extrema del desierto, en mitad de la hamada argelina, dificulta todavía más el desarrollo de una vida cotidiana. La falta de medios y materiales imposibilita que estas víctimas, puedan desplazarse de manera autónoma. La dureza de esta realidad en el desierto saharaui, nos hace intervenir, y pedir colaboración para dotar el centro de material de cura, material de vendajes, piernas ortopédicas, botas, sillas de ruedas y muletas. Así como cremas antiinflamatorias y de varices. También se enviarán pañales de adultos y empapadores.

Nuestro objetivo principal con este proyectos es otorgar dignidad a estas víctimas y hacer que puedan realizar una vida más fácil en la dureza del desierto. Sin olvidarnos que pedimos un Sahara libre, para que puedan vivir en su Tierra saharaui. En el Sahara Occidental, pues llevan desde 1975 sufriendo los daños colaterales de este conflicto, fruto de un proceso inadecuado de descolonización. (El documental Gurba, nos ofrece un amplio reportaje de la vida de las víctimas de minas en los campamentos.)